Marga Gutiérrez (Pamplona, 1977) es productora, directora y guionista. Licenciada en Comunicación Audiovisual con Máster en en Administración y Gestión de Empresas Culturales en la Universidad Europea Miguel de Cervantes. A raíz de Pura Vida (2012), compagina estas labores con la de docente en la Universidad de Navarra.
Cuerdas fue su ópera prima como directora, guionista y productora. Su anterior proyecto, Ama-Das, fue candidata a los Premio Goya. Living Kultur tenido su estreno nacional en el Spanish Screenings de Málaga.
¿Qué quieres contar a través de este documental?
Living Kultur es una mirada cinematográfica ante la paradoja de materializar lo inmaterial de la cultura viva de un territorio, en este caso Navarra. Un proyecto que dosifica, enmarca y refleja con una mirada y técnica del siglo XXI la herencia ancestral cultural para construir un discurso en torno a un viaje perceptivo y sensorial, como si de una ópera se tratara.
¿Qué trayectoria ha tenido este documental?
Living Kultur viene de un proyecto transversal que cuenta con un proyecto transmedia www.livingkultur.com así como un libro. La tercera pata es este documental que ha tenido su estreno nacional en el Spanish Screenings de Málaga y ha sido seleccionado en Festival Internacional Etnográfico de Sobrarbe, Espiello en Boltaña, donde competirá en sección oficial del 17 al 25 de marzo.
¿Por qué crees que es tan importante preservar la cultura y la tradición?
A veces la transmisión es muy vulnerable, ya que depende de personas concretas que lo hacen de forma voluntaria. Si no se apoya y lidera desde las instituciones se pierde una parte de nosotros. Y es que el patrimonio dice mucho de quienes somos. Y conecta a las personas y a las generaciones entre ellas. Debemos registrarlo y dejar huella.
¿Hay esperanza en la preservación de la identidad y la cultura originaria de nuestra tierra?
En nuestra experiencia con las personas, pueblos y asociaciones con las que hemos colaborado, hay un hacer y voluntad para hacerlo. En algunos casos muy concretos es más complicado por que faltan herederos concretos, como pasa con la espartería y el kaiku. Y también hay que aceptar que algunos se perderán y otros quizá reaparecerán.
¿Qué similitudes tiene con proyectos anteriores como Cuerdas o Ama-Das?
Tanto Cuerdas como Ama-Das hablan de experiencias femeninas en torno al dolor y la vida. Y ambos proyectos se acercan desde una mirada más narrativa a diferentes experiencias vitales. Y con Living Kultur nos hemos ido a explorar la parte más cinematográfica, casi rozando el video arte: centrado en la celebración, ensalzamiento y oda a la belleza de una parte por el todo del patrimonio. De lo que sí estoy segura es de que la forma de mirar en los proyectos anteriores, la forma de hacer y la búsqueda de la belleza de ambos proyectos anteriores han sido fundamental para atreverme con Living Kultur.
Tu productora En buen sitio está especializada en cine documental, ¿cómo ves el momento actual del cine documental?
La explosión de cine documental habla muy bien de la salud del género, pero tenemos sensación de embudo: hay muchos proyectos producidos pero luego es muy difícil acceder a la exhibición y distribución de las piezas. Pero hemos generado interés en el público, que ahora sí integra el documental como un género para ver en cines y plataformas, y eso es un objetivo cumplido importantísimo.
¿Qué supone para ti y para En Buen Sitio que sea vuestro documental el que represente a Navarra en MAFIZ, en el Regional Film Hub? ¿Qué tal ha sido la experiencia en Málaga?
El sello MAFIZ es fundamental. Toda la visibilidad que pueda darse a los proyectos es poca. Poder compartir con público y profesionales del sector los proyectos que tanto mimo se han llevado es un lujo.
Compaginas la producción, la dirección y la docencia. ¿En qué labor te sientes más cómoda? ¿Qué te aporta cada faceta?
La producción es mi estado natural, siempre he recorrido dichos espacios. Pero estando cerca de directores y directoras fabulosos aprendí las miradas narrativas y de guion necesarias, y cuando llegaron historias que me importaban quise dar el salto, y ha sido un lujo, también porque productoras como En Buen Sitio confían en ti, sino es imposible. Y está bien transitar ambos espacios, para vivir las dificultades de ambas. La docencia llegó como invitación de la Universidad de Navarra, a raíz de Pura Vida. Y la disfruto muchísimo, ya que verbalizar y transmitir experiencia te hace darte cuenta del trabajo y conocimiento acumulado.
Con el paso de los años, ¿has notado un incremento de profesionales y cultura navarra en este tipo de eventos? ¿Cómo ves a Navarra en el ámbito audiovisual nacional?
El cambio ha sido exponencial. Rodajes, profesionales, asociaciones, un clúster, agencias, medios… En 15 años Navarra ha dado un salto increíble. Y creo que no somos conscientes de todo lo conseguido. Si pusiéramos en una lista todos los nombres y proyectos relacionados con Navarra en los últimos años nos daríamos cuenta del impacto cultural y artístico. El incentivo, además ha generado ese impulso económico, que posiciona a Navarra como industria.
¿Cómo valoras la labor de apoyo de Navarra Film Industry?
Es fundamental que NFI exista. No podemos ser paracaidistas, ni debemos. Es un trabajo en equipo y aglutinar, formar y velar por el buen desarrollo de proyectos desde sus inicios los hace mejores. Y vienen años con fuertes competencias en incentivo y promoción de territorios cercanos, así que será todo un reto posicionarse y ser líderes.
